NICARAGUA El Naranjo

Nicaragua se encuentra en el corazón de América Central, formando parte de ese cinturón estrecho que une las dos partes del continente americano. Su economía se basa principalmente en la agricultura, destacándose cultivos como el maíz, el frijol, la banana, la piña y el café. Aunque no se puede determinar con exactitud el origen del café en el país, se cree que los primeros cafetales fueron introducidos por misioneros católicos españoles en el siglo XVIII.

En la región de Dipilto, a altitudes que oscilan entre los 1.200 y 1.570 metros sobre el nivel del mar, la finca El Naranjo se alza como un ejemplo de dedicación a la producción de café de especialidad. Dirigida por Daniel Rodríguez, un productor comprometido con la sostenibilidad, esta finca combina tradición e innovación, utilizando en su mayoría abonos orgánicos para enriquecer los suelos y proteger el entorno.

Más allá de la producción, la finca El Naranjo forma parte de Marilec Coffee, una cooperativa sin fines de lucro que brinda asesoría y servicios de calidad a los productores. Con un fuerte compromiso con la responsabilidad social y ambiental, esta iniciativa promueve prácticas agrícolas sostenibles y protege los recursos naturales del ecosistema donde crecen los preciados granos.

Cada lote de café se procesa cuidadosamente siguiendo el método natural. Después de la cosecha, los granos son secados durante 35 días en lechos elevados dentro de un invernadero, un proceso que intensifica sus perfiles de sabor únicos.

En cada taza, el café de El Naranjo ofrece una base de chocolate con leche, acompañada de notas afrutadas, especiadas y toques de nuez. Es dulce, con buen cuerpo y una acidez media que lo hace equilibrado y placentero. Este café refleja la dedicación y el arte que Daniel Rodríguez y su equipo invierten en cada etapa, desde el cultivo hasta el procesamiento.